¿Activo masculino - pasivo femenino?

Es inadecuado trazar una correlación entre activo-masculino y pasivo-femenino. Activo y pasivo no son calificativos de los masculino y lo femenino. Es por eso que se hace necesario definir con la mayor precisión posible, lo que se entiende por hombre pasivo. Y es importante definirlo, porque ahí descubrimos nuestra identidad. Y vivir de acuerdo a nuestra identidad es lo que nos va a llevar a vivir una vida plena y por ende a ser felices.

Tal vez en esta líneas, descubras algunos aspectos y otros no. Tal vez te identifiques plenamente. Lo importante es ir descubriendo aquello que somos, para poder asumirlo, y vivir plenamente con alegría. Y descubrir algo tan importante, sólo se puede hacer en compañía de otros.

Como toda generalización sobre aspectos humanos, lo que vas a leer es deficiente. Siempre será deficiente. Porque los matices de la vida individual, quedan ocultos por la generalización. Pero aún así, no podemos dejar de generalizar, porque es una forma de aprender.

Un hombre pasivo NO es:

v El que “cumple el rol femenino” en la pareja. En una pareja de hombres no hay rol femenino. Por más que haya hombres que les guste travestirse o usar ciertas prendas de lencería femenina. El campo de la fantasía es inmenso, pero lo cierto es que en una pareja de hombres ambos son del mismo género.

v El más débil. Puede ser el más fuerte desde todo punto de vista. El hombre pasivo asume su forma de ser, porque responde a lo que él es. No por debilidad de ningún tipo.

v Un tipo afeminado. Ser afeminado no es una característica propia de un pasivo. Puede estar presente en cualquier persona, incluidas las heterosexuales.

Un hombre pasivo ES:

v Una persona que ha recorrido un camino de descubrimiento de sí mismo. Ha descubierto dentro de sí un rasgo que marca su personalidad, y desea vivir plenamente de acuerdo a su forma de ser.

v Un hombre. Ante todo es un hombre, y se siente feliz de serlo. Pero además, le interesa que su pareja lo trate como hombre. Por más que tenga fantasías femeninas, en el fondo sabe que son fantasías y que no cambiaría el ser hombre por otra cosa. El que le guste jugar a ser mujer, no significa que desee dejar ser hombre. De lo contrario, estaríamos en presencia de alguien que no es pasivo, sino que tiene una incompatibilidad entre su figura corporal y su sexo real.

v Un hombre que se siente pleno, entregándose a otro hombre. Esto significa que su meta está definida por su entrega, mucho antes que por la penetración. Ésta por sí sola, no define un rasgo típico del pasivo. Hay hombres que han sido penetrados, y sin embargo no son pasivos. Lo que sí es propio de un hombre pasivo, es que la entrega y el amor hacia otro hombre se manifiestan en la relación sexual propiamente dicha, a través de la penetración. Ésta es la manifestación física de una forma de ser, de un determinado perfil psicológico, de una forma de amar, de una forma de comunicación con el otro. La penetración manifiesta a todos estos elementos juntos, o de alguno de ellos. Aislada de todo esto, no determina ningún rasgo en especial.

v Un hombre que SIEMPRE desea manifestar su sexualidad, su forma de ser, su interioridad, sus afectos etc. con otro hombre, entregándose para ser penetrado, en la relación coital. Esto debe configurar una característica permanente y definida. Si es transitoria (exploratoria) o alternativa (versátil), no hablamos de un hombre pasivo. Lo hacemos cuando esta característica, marca un rasgo permanente en el tiempo y permanente en su personalidad.

v Un hombre que en presencia de otro hombre, lo seduce de una forma especial. Sabe lo que quiere, y sabe lo que el otro quiere.

Todas estas son las metas del hombre pasivo. Pero para lograr estas metas hay que ser muy activo. Por eso cuando hablamos de hombre pasivo, no me refiero a quietud, tranquilidad, apatía, abulia, etc. Puede ser todo lo contrario a esto. Puede ser un profesional, un albañil, un chofer de ómnibus, un parlamentario, un atleta; puede ser un hombre soltero, un hombre casado con su familia, un divorciado, o un viudo; puede ser un adolescente, un adulto, o un anciano.

El hombre pasivo es aquel que por sus características psicológicas, renuncia voluntariamente a los rasgos temperamentales propios del varón, para vivir la relación afectivo sexual con otro hombre, de una forma diferente. Y la diferencia está en la forma de entrega amorosa. O sea, a) En su deseo de ser poseído por otro hombre b) En expresar esta entrega ofeciéndose para vivir el sexo en su interior. Pero debe darse necesarimente esta renuncia, si hablamos de un hombre pasivo, de lo contrario no está dentro de nuestra definición.

Es por todo esto que les quiero decir, que somos hombres especiales. Y por tal motivo tenemos que sentirnos orgullosos de ser lo que somos. Debemos sentirnos felices de haber descubierto lo que nos hace ser nosotros mismos. Vivir en plenitud nuestra naturaleza, es la única forma de llegar a ser felices. Cada cual desde lo que le toca vivir. Esto es, soltero pasivo, bisexual pasivo, gay pasivo, etc etc.