La vida de un bisexual pasivo

Hola: Escribo desde México y agradezco el que se haya creado un blog como este, por lo que no quiero dejar de aprovechar la oportunidad de transmitr mi experiencia de vida como un bisexual, casado, y siempre pasivo en las relaciones sexuales con otros hombres.
Mi primer relación sexual fue con un hombre, ambos eramos muy jóvenes, con escasos 13 años. Obviamente, para muchos, una edad totalmente irresponsable para haber tomado la decisión de tener relaciones sexuales, sobretodo, con una persona del mismo sexo. Sin embargo, ninguno forzó al otro, fue algo que sucedió en forma totalmente espontánea y de mutuo acuerdo.
Aún recuerdo la forma en que me sedujo, fue algo lindo, ya que me trató de una manera muy cariñosa. Estábamos solos, en su casa, pues sus padres habían salido a una reunión. Resulta que el es, desde pequeño, según me dijo, fetichista de los pies y como tiene una hermana mayor que nosostros por ocho años, es decir, ella en ese entonces tenía 21 años, y tampoco se encontraba en casa, me confesó que le gustaban los pies de su hermana y me pidió que me pusiera las medias y sandalias de tacón de ella. Yo acepté ante la idea de hacer algo fuera de lo común, pero nunca me imaginé que el ponerme esas prendas, provocaría que el se excitara tanto, al grado de besarme cariñosamente los pies. Me sentí halagado y consentido, también excitado y me empezó a acariciar todo el cuerpo, principalmente los pies, las piernas y las nalgas. Yo noté que su pantalón estaba a punto de reventar con la presión de su pene, así que en forma instintiva, se lo empecé a acariciar al mismo tiempo que yo era seducido con sus besos y caricias en mis pies. Sentí la necesidad de sacar su pene de la prisión de su pantalón y así lo hice, en cuanto lo ví, muy grande y duro, bello, circuncidado, no muy grueso, pero sí largo, inmediatamente me hinqué para llevármelo a la boca. Eso lo puso a el aún más excitado, por lo que me pidió que me quería penetrar. Yo, estando igual o aún más excitado que él, acepté de inmediato. Así fue como empezó mi vida sexual. Con el objeto de no aburrir más con este relato, espero en otra comunicación continuar con mis experiencias para poder transmitírselas.
Saludos y felicidades al creador de este blog.
Agustín.